Me he puesto los vaqueros ajustados y los zapatos de tacón. Me he dado rímel en las pestañas y color en las mejillas. Me he pintado los labios. Voy a por ti.
He vuelto con los zapatos en el bolso. El rímel corrido, manchurrones negros por toda la cara. El color de los labios está intacto. Nadie los besó. He vuelto sin ti.
1 comentario:
Precioso retrato de la tribulación femenina.
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