lunes, 23 de diciembre de 2013

Por un simple pajarillo



Imagen de Rolland András Flinta


Para recuperar el equilibrio, me apunté a clases de yoga. La meditación me ayudaba mucho; después de algunas sesiones, lograba salir de mi cuerpo, me elevaba sobre la sala, y me quedaba sentada en el platillo de una balanza, completamente centrada. Desde allí observaba todo, con los ojos cerrados. En un platillo de la balanza estaba yo y en el otro, el mundo. Y el mundo ni me alzaba a las estrellas ni me hundía en el abismo aplastándome con su peso. Permanecíamos cada uno en su sitio, en paz y armonía. El desorden volvía cuando se me acercaba ese pajarillo revoloteando, se posaba en mis pies y comenzaba a picotearlos. El peso de ese diminuto ser me hundía en la añoranza de volver a sentirme rodeada por tus brazos.

* * *

Para el viernes creativo de el bic naranja, 20 de diciembre de 2013

7 comentarios:

Unknown dijo...

Conmovedor relato pleno de poesía.
Que tengan FELIZ NAVIDAD Y UN SUPER 2014.

puri.menaya dijo...

gracias Carlos, Feliz navidad y maravilloso 2014, lleno de imaginación y proyectos

Tramos dijo...

Tierna descripción de ternura y amor, mi enhorabuena¡¡¡

Besos muchos ♥♥

arktos-temis dijo...

Qué difícil el equilibrio, y que inestable, uf.
Me gustó el intento Puri.
Abrazos.

Arte Pun dijo...

Qué bueno Puri, así es, basta con un simpe pajarillo para desequiilibrar lo que parecía inmóvil, lo que se llama un equilibrio inestable.

Me ha encantado. Felicidades y que pases bien estas fiestas.

Besos

LA CASA ENCENDIDA dijo...

Precioso este micro. A veces nos desequilibramos con lo más mínimo, que puede ser lo más...
Espero que estés pasando una felices fiestas y espero que tengas una entrada de año preciosa.
Besicos muchos

puri.menaya dijo...

Gracias Tramos, Miguel Jimenez, ARtePun, NAni, estamos hechos de equilibrios insetables....
Besos para todos