Nuestro amigo Pablo Gonz nos presenta su nueva novela LEBESNRÁUMICA, en formato de audiolibro. Si queréis conseguirla, podéis pedírsela aquí. Es un regalo que comparte con todos sus lectores.
Y también está en la nube aquí.
Yo ya la he escuchado y me ha sabido a poco. Vamos, que hubiera seguido escuchando más. Os animo a que también la escuchéis y la compartáis. No voy a contaros mucho de ella, tenéis que escucharla. Nos presenta una comunidad de vecinos, con sus distintos personajes y sus circunstancias, y plantea el problema de ese pequeño espacio vital en el que se encuentran inmersos, que los ahoga. La solución para ampliar ese espacio, traspasa las barreras de lo cotidiano. Y cuando todo parece estar en su sitio, la familia feliz, ese espacio recién conquistado vuelve a desaparecer. Con su pelín de humor, con una buena caracterización de los personajes (ese toque de los vecinos filipinos por aquí y por allá), al final nos lleva de nuevo al principio.
No sé si es una novela corta o un cuento largo pero se sigue con placer.
Es además un buen regalo para las personas mayores, para aquellos que van perdiendo la visión o para ciegos. Yo espero llevársela a mi madre, que ya no lee, precisamente porque sus ojillos cada vez se cierran más.
2 comentarios:
¡¡¡Puri!!! Muchas gracias por la audición, por el apoyo, por esta entrada.
Te cuento que la obra está teniendo muy buena recepción sobre todo entre los ciegos porque hay muy pocos libros actuales que sean de acceso gratuito en este formato. Estoy muy contento con todo lo que está pasando. Y encima me traes a tu blog. Un gran honor, gracias.
Abrazos fuertes,
P
PD. "N35" es una novela corta y a pesar de eso, yo pensaba que ya era muy larga para el formato. Me preocupa no pasar de los 90 minutos que es lo que suele durar una película. Tendré en cuenta tu comentario para el futuro.
Pablo, el honor es mío por poderte ofrecer una habitación en mi casa...
En cuanto a la longitud, no creo que un poco más de longitud le siente mal al formato audiolibro. Tampoco es necesario escucharla de un tirón, igual que un libro podemos detener la escucha y continuar en otro momento. Yo la dosifiqué en tres o cuatro trayectos de casa-trabajo trabajo-casa y es perfecta para eso. He alargado un poco más esta entrada, porque la escribí deprisa para que saliera esta semana, y tampoco la comenté demasiado.
Besos de cocolate!!!
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