Encuentro en el colegio Mateo Valero de Alfamén

El pasado 26 de abril estuve en el colegio Mateo Valero de Alfamén, con los chicos que habían leído mis libros. Fue un encuentro con el colegio entero, primero con los alumnos de 5º y 6º de primaria, que habían leído el libro de La bruja de chocolate,

5º y 6º de primaria

después con los de 3º y 4º, que leyeron Dragón busca princesa,

3º y 4º de primaria


y por último con los niños de infantil, 1º y 2º de primaria, que disfrutaron de Monstruo, ¿vas a comerme?

Ed. infantil y 1º y 2º  de primaria

Con los de 5º y 6º de primaria estuvimos hablando de mi pasión por las brujas, sobre cómo la bruja Pimpi me contó su historia para que yo la escribiera. Hablamos de las mala brujas que en realidad son tan buenas amigas entre ellas, de la malísima Runilda, del dragón Urgus que a todos nos cae tan bien (aunque sea muy peligroso acercarse a él). 

Los de 3º y 4º hicieron muchas preguntas, estaban interesados por saber como se hace un libro y por mis otros libros publicados, quisieron saber desde cuando escribía (casi desde pequeñita, les dije, pero más en serio como desde los dieciocho años).

El último grupo, que incluía los tres grupos de infantil, 1º y 2º de primaria habían leído Monstruo, ¿vas a comerme? y se sabían muy bien a qué saben los cuentos:

Si habla de princesas, 

el cuento sabe a fresas, 

si es de un hada

a rica mermelada

y si sale un dragón, 

entonces sabe a limón.

Estos chicos fueron muy participativos, gritaron como el monstruo, comieron sus palabras de los cuentos y me enseñaron que había palabras que le gustaban al monstruo, como por ejemplo: amor, amigo, ayudar... Y palabras que no le gustaban nada como: guerra, pegar, odiar... (Seguro que se os ocurren muchas más).

Con ellos estrené una poesía nueva que preparé especialmente para la ocasión: La princesa obesa. Es la continuación del cuento que el monstruo empieza a contar esa noche al niño:

Esto era una princesa

que se sentaba a la mesa 

y solo comía y comía 

y los labios se relamía...

Si queréis ver el cuento-poesía completo de la princesa obesa, pinchad aquí 

Por último habéis saber que uno de los chicos de primer ciclo, Alejandro, me pidió que le escribiera  un cuento que se titulara Alejandro Galactic, imaginaos quién iba a ser el protagonista. Alejandro, no creas que me he olvidado de mi promesa, tengo que pensar ese cuento del espacio, te lo debo, ya os avisaré cuando esté preparado, ¿eh? A partir de ese momento, todos los niños quisieron un cuento en el que ellos fueran los protagonistas, como no.

Disfruté mucho de este encuentro con los chicos del colegio de Alfamén y doy las gracias a Leticia Pérez, con quien pensamos realizar esta actividad, así como a Ainhoa, responsable de la biblioteca del cole y a la directora del centro con las que hemos coordinado todo. Y también a todos los profesores del centro que estimularon a los niñospara que disfrutaran con mis libros. Fue una mañana estupenda compartiendo con los chicos mis historias y nuestras ganas de leer libros.

Por ultimo me hicieron ¡tres regalos!: un vaso de cerámica azul de Muel de parte de Leticia y su asociación cultural Media Luna, un bonito bolígrafo del colegio que me entregó la directora, para que siga escribiendo ;)   , y una piruleta marcapáginas chulísima con mi nombre. 

 Después comimos con Leticia y mi amigo Juanjo (¿no os he dicho que la idea de todo esto fue de él) en un restaurante de Alfamén y por la tarde de vuelta a casa, contenta, muuuy contenta. Fue un viernes especial.